13 razones por las que te rindes tan fácilmente (+ cómo no hacerlo)

¿Qué Película Ver?
 
  ilustración de una mujer ondeando una bandera blanca después de darse por vencida fácilmente

Es muy común que las personas renuncien a sus sueños, metas y pasatiempos antes de tener la oportunidad de comenzar.



Porque, seamos realistas, las cosas buenas toman tiempo y puede ser difícil esperar.

Ya sea por miedo al fracaso, falta de motivación o simplemente por no creer en sí mismos, a muchas personas les resulta difícil mantenerse motivados y decididos cuando se enfrentan a obstáculos.



En el mundo acelerado de hoy, donde la gratificación instantánea es la norma, los estándares de la sociedad son cuestionables y la paciencia es limitada, rendirse a menudo parece ser la opción más fácil.

Desafortunadamente, esta actitud de renunciar a la primera señal de un desafío nos impide alcanzar nuestras metas y limita nuestro potencial.

Entonces, ¿por qué exactamente nos damos por vencidos tan fácilmente? Esto puede parecer una pregunta sin respuesta para siempre. Incluso podría pensar que darse por vencido fácilmente, ya sea en trabajos, relaciones, metas, etc., es solo una parte de quién es usted.

Pero ese no es el caso. Aunque las razones por las que te rindes tan fácilmente pueden variar, no están ligadas a tu personalidad. Eso significa que puedes cambiarlo.

Este artículo comparte 13 razones por las que te rindes tan rápido y algunos consejos tangibles sobre cómo detenerte. Al final, podrá identificar qué motivo se aplica a usted y descubrir cómo hacer los cambios necesarios para que pueda dejar de darse por vencido y comenzar a vivir su mejor vida.

¿Por qué me rindo tan fácilmente?

1. Tienes expectativas poco realistas.

Si tiene expectativas poco realistas, es posible que le resulte difícil alcanzar las metas y perseverar en la adversidad. Tener expectativas poco realistas puede afectar significativamente la vida de una persona.

Las expectativas poco realistas pueden ser una fuente importante de frustración, decepción y estrés. Pueden estar relacionados con casi cualquier cosa en la vida. Por ejemplo, es posible que tenga expectativas poco realistas sobre su relación, su trabajo, usted mismo o cualquier otra cosa. Establecer nuestras metas demasiado altas o esperar demasiado de nosotros mismos o de los demás puede generar sentimientos de inadecuación y abrumación, lo que nos hace rendirnos.

Las expectativas poco realistas suelen basarse en creencias falsas sobre lo que deberíamos poder lograr en un tiempo determinado o con los recursos disponibles. Pueden formarse durante la infancia y quedarse contigo, o puedes haberlos creado a lo largo de tu vida. Pero, si tienes expectativas poco realistas de algo, puede ser frustrante que no estés logrando lo que esperas.

Estas expectativas pueden parecer razonables al principio, pero pronto se vuelven poco realistas cuando la realidad no las cumple. Es importante reconocer cuándo sus expectativas están fuera de línea con la realidad para que no termine sintiéndose decepcionado y desanimado.

Cuando una persona tiene expectativas poco realistas, está trabajando para lograr algo que no podrá lograr. Una vez que se dan cuenta de eso, es natural que quieran darse por vencidos.

Ejemplos de expectativas poco realistas:

  • Pensando que le gustarás a todo el mundo. Esto no es realista porque es imposible que le gustes a todas las personas que conoces en la vida. Todo el mundo tiene una personalidad única y, a veces, las personalidades chocan.
  • Pensar que el matrimonio debería ser fácil. Debería ser una brisa porque se aman. Pero eso definitivamente es poco realista. Las relaciones, incluido el matrimonio, requieren esfuerzo, paciencia y perseverancia. Es natural pasar por buenos momentos y por momentos más difíciles. Pero no es un viaje fácil todo el tiempo, y no es razonable pensar que lo será.
  • El pensamiento de que debes comer sano el 100% del tiempo. Desafortunadamente, esta expectativa poco realista no permite golosinas, vida, etc. Comer sano es esencial, pero si te fijas expectativas poco realistas, te resultará complicado mantenerte motivado.
  • Es posible que recién haya comenzado un viaje de acondicionamiento físico y sienta que debería estar más avanzado de lo que está. Esto puede hacer que sientas ganas de rendirte muy rápido. La condición física, la fuerza y ​​la resistencia son cosas que se deben trabajar y mejorar. Encuéntrate donde estás y déjate crecer y fortalecerte sin el apego de expectativas poco realistas.

Es importante reconocer cuándo nuestras expectativas están fuera de línea con la realidad, ya que esto puede generar sentimientos de inadecuación y agobio. Cambiar estas expectativas poco realistas es esencial para mantenernos motivados y enfocados en alcanzar nuestras metas. Requiere autorreflexión, evaluación honesta y la voluntad de ajustar su actitud, mentalidad y enfoque si es necesario.

Al reconocer la diferencia entre lo que creemos que debería ser alcanzable y lo que es realistamente alcanzable, podemos aprender como bajar las expectativas y establecer metas realistas que nos ayudarán a tener éxito sin sentirnos abrumados o desanimados por el fracaso.

cuando un chico te mira intensamente

2. Te falta autodisciplina.

La autodisciplina es una parte integral de llevar una vida exitosa. Sin él, las metas y los sueños de uno pueden desaparecer rápidamente, dejando a la persona sintiéndose impotente y frustrada. La falta de autodisciplina puede tener graves consecuencias en muchas áreas de la vida, incluido el éxito profesional, las relaciones personales, la salud física y el bienestar mental.

Puede dar lugar a una mala toma de decisiones, procrastinación, dificultad para completar las tareas a tiempo o cumplir con los plazos, baja motivación o falta de persistencia cuando se enfrentan a desafíos u obstáculos. Además, puede provocar hábitos poco saludables como beber o comer en exceso, afectando negativamente tanto a la salud física como mental.

La autodisciplina y el autocontrol pueden ser un desafío, pero son esenciales para llevar una vida exitosa. La autodisciplina requiere controlar nuestros pensamientos y acciones para alcanzar nuestras metas u objetivos. Al mismo tiempo, el autocontrol nos permite resistir la tentación o las distracciones que podrían desviarnos del logro de esos mismos objetivos.

Se necesita práctica y dedicación para dominar estas habilidades, pero las recompensas valen el esfuerzo. A persona disciplinada tiende a tomar mejores decisiones, concentrarse en las tareas que tiene entre manos, ser más productivo, tener niveles más altos de motivación y trabajar hacia el éxito con mayor confianza.

Imagínalo así: la autodisciplina es el camino entre definir cuáles son tus objetivos y alcanzarlos.